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miércoles, 10 de diciembre de 2014

CUANDO SE APAGA EL CALEFONT

Hay algo más desagradable que se te apague el calefont? En realidad que se te acabe el gas.
Grafiquemos la escena: Te estás duchando, obviamente todo enjabonado, tarareando una canción, refregándote la ensaladera con los ojos semicerrados y de repente... el agua cambia de temperatura hasta tornarse completamente helada (cosa que ocurre en un par de segundos). En ese momento, cuando pegas un gritito ahogado, medio híbrido (entre femenino y masculino) con una mueca medio rara y una contorsión de tu cuerpo ídem, como tapándote de no sé qué, es cuando le das crédito al dicho; A este gueón se le apaga el calefont!!!
Pero después viene la otra parte si no tienes para comprar un gas enseguida, claro. El típico tarro grande con agua con su tonto cachirulo (Tarrito chico que los maestros de la constru usaban para mojar ladrillos y demases). El gueveo para calentar una tetera a las 6 de la mañana wn, prendiendo el fósforo medio dormido aún, rascándote el culo mientras tanto, es digamos, una escena... rara.
Pero miremos la vida con otro cristal viejo, quién puede decir que mientras se baña hace ejercicios? Nadie poh wn. Porqué agacharse no sé cuantas veces para llenar el cachirulo y cada vez más mientras el agua del tarro se vacía te deja las pantorrillas firmeza viejo, parece una clase de step wn.
Creo que voy a patentar esta idea. Hasta la próxima!!

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